Con la publicidad de las obras de Canova y de Hayez fui con las expectativas altas. El recibimiento es muy agradable, te explican de palabra el museo y te dejan a tu aire, hay códigos QR para algunas obras. Pero a ver, tienen Una Sola obra de Canova y es la estela funeraria del hijo del señor Tadini. De Hayez creo que hay cuatro cuadros. El palacio está falto de lámparas, ( creo que hay dos ) , muebles ( salvo las vitrinas de exposición los más interesantes y escasos eran de una donación de los años 50 )...y en general de cariño y/o medios: hay muchos, muchos clavos y alcayatas de obras que ya no están o cambiaron de sitio. Muchos de los suelos de las salas tienen unas grietas grandíisimas, que ocasionalmente se ven en alguna pared. Hay carteles de restauraciones de obras puntuales de alguna entidad privada en colaboración con los amigos del museo; pero les queda mucho por hacer. La parte superior “arreglada”a mí no me gustó nada. La colección de porcelanas es interesante . Está bien si se está en Lovere pero no para ir expresamente.

Especialmente si pasas por allì cuando dan clases. Se oye mùsica buena estando en la calle. La calle es el paseo del lago que es muy romàntico, cuidado y arreglado.