Concepto original y sitio agradable... pero, valorando lo que fue mi experiencia: un desastre el servicio. Estuvimos 45 minutos con la bebida servida esperando la comida, que no eran más que un brownie y un donut, obviamente ya elaborados desde no se sabe cuándo. Ni una disculpa tras reclamar dos veces, a la tercera se resolvió porque fuimos nosotros personalmente a reclamar los platos en la barra. Una pena... no volveré. Incompetencia absoluta en el trato al cliente.