El escenario natural muy lindo. Los monos demoraron en aparecer, pero una vez que ya salió uno, otros vinieron y estuvieron saltando de bote en bote.
A mi esposo le encanto. Mi hija pequeña (año y medio) sufrió mucho mientras se movía el bote (fue dificil conseguir un chaleco salvadvidas par ella, y estuvo incómoda), pero le gustaron los monos cuando aparecieron.
En el santuario de Perezosos, se podían apreciar (de lejos) estos animalitos. Pensé que s epod´ria tener un contacto más directo, pero no fue así.
El Mariposario bonito, pero mucho calor. Igual la zona de orquídeas.
El guía, muy amable. El tour era biligüe (yo y mi esposo hablamos inglés y español- mi suegra solo español-, y un grupo de EEUU hablaba sólo inglés). El guía trató de dar los 2 idiomas, pero priorizaba el inglés, por lo que yo estuve traduciendole a mi suegra por ratos.