Elegimos este hotel nuestra última noche en Escocia por su proximidad al Aeropuerto ya que podíamos dejar el coche de alquiler con tranquilidad antes de tomar el vuelo de regreso (está a penas a 10min de distancia en coche). Si quieres ir al centro solo hay que pedir un Uber y en 10min estás en the North Bridge por aprox 16£. En The Bridge Inn nos encontramos un restaurante/pub con cuatro habitaciones en el piso superior encantador, distinto y muy muy acogedor. Nos arrepentimos de no haber podido disfrutar al menos de dos noches en él. Se encuentra en una zona residencial a las afueras de Edimburgo con casas bajas, clubs de campo y un canal junto al que se dispone la terraza del restaurante. Perfecta para charlar al atardecer con una botella de vino blanco. Cenamos en el restaurante (mejor reservar con antelación porque se llena de los habitantes locales), La Cocina de las mejores que probamos en Escocia. El bacalao estaba impresionante y el Steaky Toffee Pudding de diez. Antes de subir a nuestra habitación tomamos un whiskey maravilloso que elegimos gracias a los consejos de la encantadora camarera. Todo el personal es agradable y encantador en realidad. Nuestra habitación era Bryce. Aunque no es muy grande si es muy cómoda, la cama era enorme y el baño tenía un plato de ducha muy amplio. Este lugar tiene además historia, y merece la pena descubrirla en la web ;).…
Visité aquí durante la pandemia de covid. El personal era amable y todo covid seguro. Mesas restringidas a 2 hogares y uso de máscaras. La comida era de alta calidad y servicio rápido. Un ambiente bastante agradable también. Las bolas de haggis se veían bien. El pudín de caramelo pegajoso también era encantador
Es la tercera vez que salimos a comer desde marzo. Me sentí muy seguro con todas las medidas que habían puesto en marcha en el restaurante. La comida era deliciosa. Definitivamente es bueno salir de nuevo y tener a alguien más cocinar para mí.
Restaurante muy acogedor. El restaurante tenía un buen ambiente y todo el personal era muy amable y ofrecía un buen nivel de servicio. La comida era buena, pero no alucinante. Este es un restaurante a un precio razonable que vale la pena visitar si vive o visita las afueras de Edimburgo.
El encargado de la piscina en el hotel en el que nos alojamos nos recomendó aquí. ¡Realmente me alegro por esto! ! La reserva fue fácil. . . . el servicio fue excelente. ¡La comida estuvo fantástica! Mi compañero tenía bon bons haggis como entrante que disfrutó. Luego tuvo el pescado y las patatas fritas que estaba realmente fresco. Tuve el pastel del día, ¡el mejor pastel que he probado! ! Altamente recomendado. El entorno era encantador :) a lleno para tener dulces por desgracia.
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