Cagliari, la ciudad más grande de Cerdeña (con un poco más de 150.000 personas) y su capital durante siglos, en la costa sur de la isla, ofrece la mezcla perfecta de recreo y exploración. La playa de Poetto, de 8 km de longitud, se encuentra entre las mejores playas de ciudad del Mediterráneo y junto a la adyacente Marina Piccola, consigue satisfacer a todo el que persigue sol y mar. A aquellos que busquen cultura les encantará el distrito antiguo de Cagliari, Castello, donde torres del siglo XIII guardan todavía las murallas medievales de la ciudad.

Situada en el Estrecho de Gibraltar, donde se entrelazan África y Europa, Tánger ha mantenido su relevancia estratégica durante mucho tiempo. Gobernada, durante siglos, por oleadas de conquistadores, incluyendo romanos, vándalos, bizantinos, árabes y portugueses, la ciudad tiene una antigüedad de más de dos milenios y medio , lo cual la convierte en la más anciana del Norte de África. La medina, kasbah, bazares y souks son los escenarios más vibrantes del país, y sus playas son excelentes. Durante el último siglo, Tánger se ha convertido en el destino favorito de la jet set internacional.

Con su castillo en la cima de la colina y su arquitectura medieval, Guimaraes parece salida de un cuento de hadas. Se dice que fue el lugar de nacimiento de Portugal. La ciudad está designada por la UNESCO y cuenta con jardines cuidados, un palacio histórico y una iglesia del siglo XIII.

Bristol es una ciudad británica estrafalaria con hermosas vistas a las colinas y montones de lugares históricos para explorar. Cualquier persona interesada en los barcos quedará maravillada a bordo del SS Great Britain de Brunel, el primer gran transatlántico del mundo y del Matthew, una réplica del barco en el cual John Cabot navegó hacia América en el siglo XV. El elegante puente colgante de Clifton es otro lugar de visita obligada.