Estuvimos esperando un buen rato y llegaban mesas después de nosotros y los atendían primero, así varias veces , finalmente nos fuimos sin tomar nada y ni una disculpa e de el empleado que nos sentó en la mesa, que posteriormente miro como nos íbamos.

Es la segunda vez que paramos las dos muy bien, con la consumición te ponen tortilla y patatas fritas y con el café un churro.
La comida correcta y buen precio los bocadillos bastante grandes.

Cuando entras, parece que estás en una cafetería de ensueño, con esas lámparas y apliques, que te hacen recordar los grandes salones de baile y banquetes, de las antiguas películas.
El personal muy amable y educado, de una gran profesionalidad, que te hacen parecer un cliente de toda la vida. Gran relación calidad precio.

Estábamos paseando por la calle de Colón y pasamos por esta cafetería que nos llamó la atención. Decidimos entrar a tomar unas cañas y a picar algo. Pedimos dos cervezas y un sandwich mixto. Como tapa nos sacaron dos pintxos de tortilla de patatas. El sandwich se podría mejorar, ya que tenía la loncha de jamón cocido demasiado gruesa, pero la tortilla una de las mejores que hemos probado nunca. Servicio un poco caótico, pero bastante rápido. Local agradable.

Reacalamos con frecuencia en esa cafetería, después de nuestras caminatas frecuentes hasta el centro de Vigo.
Situación inmejorable, al lado de la calle del Príncipe.
Trato agradable y muy profesional; y nada caro para esa situación privilegiada.