Hacía tiempo que no comía en este restaurante, y recordaba una calidad precio muy buena, la comida era toda de gran calidad. Siento mucho tener que escribir que ayer no estuvo, ni de lejos al nivel que esperaba de este sito. Atención y rapidez en ser atendidos correcto, profesional, muy bien, pero la calidad del menú no lo era. La ensaladilla de centollo con muselina de ajo, era una ensaladilla de patata con mayonesa con una capa de merengue por encima, increiblemente mala. La merluza de pincho en tempura, toffee de ajo y caldo de pimiento asado suena genial, pero era un trozo pequeño de merluza de mala calidad(como descongelada), un pequeño y triste trozo de merluza rebozado en un plato cuyo salsa para acompañar era aceite de cocido de carne, lo del caldo con sabor a pimiento brillaba por su ausencia. Es la primera vez en la vida que dejo una torrija sin comer, era un trozo de pan duro, seco por el centro y bañado en aceite. Lo siento mucho pq me encantaría estar escribiendo que fue una experiencia increíble, pero increíble es pagar 40€ (agua no entró en menú porque la botella de vino ya cubre para tres, vino del año penoso, y eso es difícil en La Rioja), por ello, no puedo recomendar el restaurante y sin duda no repetiremos.