Hemos estado 3 noches en este hotel y ha sido todo un acierto. Lugar precioso, ya que es un antiguo palacio totalmente restaurado. Silencio y descanso asegurado, ya que no hay nada alrededor que te pueda molestar. Habitaciones cómodas, con un tamaño adecuado y con un baño a nivel. Bañera hidromasaje en nuestro caso, con todo lo que necesitas. Detalle de agua en la habitación y amenities de baño . Servicio de desayuno excepcional, servido en mesa, con una oferta muy buena tanto en salado como en dulces, todo casero y acabado de hacer cada día. Las personas que lo atienden son súper cercanas, cariñosas y se preocupan de que te sientas bien atendido. Totalmente adaptados a los protocolos de Covid, desde que llegas hasta que te vas, con toallitas, termómetros, gel, espacio entre mesas,... También dispone de restaurante propio y he de decir que la cocina está muy acertada. Producto de proximidad y muy bien tratado, además del servicio del restaurante que es muy bueno. Así que solo puedo agradecer a todas las personas que trabajan duro en este local, lo bien que lo han hecho estos días y lo bien que nos hemos sentido allí. Recomendable si vas a Cantabria. Gracias por el take away, nos habéis salvado la vida!! :)Más
- Wi-Fi gratis
- Estacionamiento gratis