El hotel ubicado en pleno centro del pueblo es increíble. Antiguo almacén de armas, hoy en día es un increíble hotel moderno.
La habitación era espectacular; decorada con muy buen gusto. El baño muy bonito y con todos los amenities que uno podría necesitar.
Además un detalle que en la habitación teníamos dos botellas de agua de obsequio y café y té. Realmente precioso!
Y el pueblo merece la pena visitarlo porque es muy bonito.