Excelente lugar, en ubicación y atención. El personal es muy atento a las necesidades de cada huésped. Yo viaje a mediados de enero con mi familia. La gran ventaja es que Miraflores es una zona muy segura, esto apesar de las protestas que están ocurriendo en el país en este momento.
El baño, la cama y la habitación en sí es excelente. También cuentan con un pequeño restaurante en el primer piso, que ayuda a solucionar los requerimientos básicos de comida.
En mi caso el desayuno estaba incluído y estuvo muy bien. En el hotel me ayudaron con la coordinación de transporte desde el aeropuerto.
Una mención especial a Yizak, que en todo momento nos brindó un trato excelente. Aunque debo decir que todos fueron geniales. Esperemos volver si Dios lo permite .