Todo bien comida buena menos el camarero que te recibe y te atiende que es lo más desagradable del mundo comida buena todo bueno limpieza excelente pero la atención del camarero y la chulería del camarero es para no ir más.

Buen sitio para disfrutar de carne a la parrilla y especialidades argentinas. La cerveza te la ponen en una jarra de cerámica y me parece un verdadero acierto. Te ofrecen carne madurada que es de muy buena calidad. Pedimos la carne "en su punto" y se les pasó un poco (en estos casos es mejor quedarse corto porque después ya no tiene solución, de ahí que no le de más puntuación), de todos modos nos la comimos porque estaba deliciosa. Una pena que no pongan café o algún tipo de postre (solo ofrecen algún licor). El camarero desde que nos recibió muy amable y educado. Volveré a probar más tipos de carne de la vitrina de maduración. El local es amplio y aunque tengas la parrilla cerca no te vas oliendo a parrilla.

Hoy pasamos a comer a la pampa, cuando llegamos estaba casi vacío y pasamos dos personas a coger sitio mientras otras dos buscaban un sitio para aparcar. Cuando entramos nos preguntaron cuántos éramos y respondimos que 4 y nos dijeron que nos sentásemos donde quisiésemos ya que el sitio estaba vacío. Cuando llegamos a la mesa donde elegimos sentarnos , un camarero de malas forma, con un tono de voz alto, nos dice que no podemos sentarnos hasta que no esté la mayoría, le replico que ya nos han dicho que nos sentáramos, que las otras dos personas estaban aparcando y me dice que lea un cartel, pero finalmente accede. Esto ya me ha parecido como para levantarme e irme, pero continuaron.
Cuando vienen a tomarnos nota, nos hablan de la nueva Carne madurada que tienen y les comento que no nos interesa que pediremos Carme para el centro y otras cosas, y cuando termino de pedir me dice el camarero, enserio? Yasta? Me ha parecido algo terrible, ya que puedo pedir lo que quiera. Y para terminar, entraba gente la cual se tenia que poner en espera y el camarero les respondía fatal, diciendo que el tiempo sería el que que fuese y cuando se terminase de comer.
En definitiva lamentable, no volveré.

Pues llegamos para cenar algo y nos atendieron rápido.Pedimos un par de empanadas picante( ricas) y una ración de secreto ibérico (amplia,con salsa muy rica).La cerveza fria muy apetecible en jarra de barro.Nos invitaron a un chupito y la verdad el camarero muy amable.Volveremos

La comida realmente no era mala pero el precio es bastante elevado para lo que sirven, el problema real es el poco respeto del personal hacia los clientes..
Tanto cocinero como pinche no pararon de vocear en todo momento, ademas de tener puesto en una tablet un partido de futbol(muy poco profesional bajo mi punto de vista)
Las camareras arrogantes y mal educadas, una de ellas incluso me criticó e hizo una burla por pedir por favor un vaso ancho para la bebida..
En general una experiencia bastante mala, no estuvimos a gusto en ningun momento puesto que no podiamos ni mantener ni una conversacion ya que lo que resonaba en el local eran las voces del personal y el partido de futbol de fondo.
PARA NO VOLVER