Ideal para el descanso, un sitio unico donde además te hacen sentir especial; atención personalizada por su propia dueña, comida saludable, incluyendo las meriendas, y lo más importantes las terapias cada una mejor que la otra, son imperdibles , tienes que hacerte varias, mi favorita la exfoliación y masaje relajante. Es un lugar para leer, estar contigo, escuchar el silencio, disfrutar de un hermoso paisaje .

Excelente comida vegetariana, atención muy buena y el spa lo mejor liderado por una mujer que le impregna detalles para hacer tu estudio más agradable. . Buena vista , lugar ideal para meditar y descansar 100% recomendable

Hace muchos años había escuchado muy buenos comentarios de este Spa, y por diversas razones no lo había podido visitar hasta este fin de semana, con motivo de los 50 años de mi esposa.
Una gran idea, por fin concretada.
Un lugar con mas de 25años de operaciones, enclavado en la periferia de la Colonia Tovar, en el Edo. Aragua, Venezuela, entre siembras de montaña, fresas, moras, legumbres, hortalizas y casas con los tipos rasgos arquitectónicos de la Selva Negra de Alemania característicos de la zona.
Instalaciones IMPECABLES, pulcras, sencillas y hermosas, con ambientes fabulosos para el relax y despejar la mente, 2 Jacuzzies inmaculados, Sauna, Vapor, y áreas súper confortables para tratamientos y terapias.

El personal de hostelería, alimentación y terapias, con altísimo nivel profesional y además un trato excelente.
Un paquete que incluye Alojamiento, Alimentación y un Masaje de relajación, además de un catálogo muy completo de terapias y tratamientos a su disposición con tarifas muy equilibradas y razonables, dado el nivel de excelencia en todo sentido.

Un menú homologado para todos los huéspedes, de corte vegetariano, con base a los productos de la zona, gran sabor y sazón de su Chef, que sorprende y delita aún a omnivóros como yo. Usted se levantará de la mesa absolutamente satisfecho, agradado y sorprendido.

Si gusta de los vinos, puede llevar los propios para su descorche o aceptar la sugerencia de la casa y disfrutar de su botella, y compañia en un ambiente distendido, pero muy relajante, disfrutar del silencio, norma de la casa, y el clima fresco de montaña.

Un lugar ideal para ir en pareja, no apto para niños ni jóvenes adolescentes, no por sus instalaciones, sino por la naturaleza tranquila y apacible de sus ambientes.

Es evidente que el lugar consolida la excelencia propuesta desde su creación, y la visión de altísima satisfacción de sus visitantes y huéspedes.

Totalmente recomendable y repetible.. nadie se cansa de la excelencia y en este lugar abunda además con simpatía y buen trato.. ah y no deje de comprar las mermeladas de Mora, Fresa e Higos, que prepara el personal de cocina, además de su frescura, tienen un pícaro toque de especias muy sabroso.