Es un lugar brutal para sentarse a leer, charlar y simplemente pasar la tarde.
El pan de chocolate delicioso

La primera vez vine sola, gracias a la hermosa experiencia organice un cumpleaños y continuamente vengo, quede encantada, no solo por el diseño del lugar y el café absolutamente deliciosos, si no por la atención, calidez y amor de todos los que trabajan allí, se siente uno como en casa, pues todo lo explican, comparten, y aceptan todo tipo de sugerencias.

Vengo en solitario la mayoría de las veces no solo a tomar uno de los mejores cafés filtrados de Armenia. Vengo a inspirarme en largas tertulias con el talentoso pintor detrás de este proyecto, Daniel Toro. ¡Gracias!

El lugar es lindo, tiene un buen servicio y realmnete se siente un buen ambiente con su decoración, estaba muy cerca a mi hospedaje. Lo recomiento.

Un lugar maravilloso que brinda una experiencia distinta del café y la cultura que lo rodea. Una razón para visitar Armenia en cualquier visita al eje cafetero.