Volvíamos al Playaballena tras dos años y medio pues la última estancia la disfrutamos en Febrero de 2020 justo unos días antes del inicio de la pandemia. Íbamos un poco temerosos por los comentarios acerca de la comida y porque es cierto que en nuestra última visita nos pareció que el bufet era repetitivo y de peor calidad que en años anteirors. Sin embargo ahora hemos apreciado una mejoría sobresaliente. La comida es variada y muy apetitosa...tanto los platos fríos, como los guisados y las carnes o pescados a la plancha. Por lo demás, todo excelente: ubicación, limpieza, animación, atencion del personal. Ahí no ha habido sorpresas porque después de varios años repitiendo en el hotel conocemos la profesionalidad y amabilidad del personal. Nos permitimos destacar a Fermín y todo su equipo de recepción. En definitiva, muy recomendable.

Buenas instalaciones y personal inmejorable. Se podria mejorar las almohadas y colchones. No obstante, di un aviso sobre el colchon en Recepción, e inmediatamente solucionaron el problema con un cambio. Buen servicio de comidas.

Destacar de este hotel las instalaciones. Sin duda sus piscinas y toboganes fue lo que más me impresionó. Habitaciones amplias, limpias y muy cómodas. Los niños se lo pasan fenomenal. Otro punto a favor es q está a pie de una preciosa playa. La comida sería un aspecto a mejorar así como la minidisco para niños, se queda muy pobre, duraba 15-20 minutos y todas las noches las mismas canciones. Teniendo en cuenta que es un hotel enfocado para niños debiera mejorarse.