Lo que he vivido en este... hotel, no lo he vivido nunca antes y me considero una persona que se ha movido bastante, viviendo en tres países distintos y viajando bastante por España. Desde la llegada, que me dicen que cierran la recepción durante una hora y he de apresurarme para hacer el check- in hasta el momento en el que tengo que solicitar un cambio de habitación debido a que el olor en la habitación que me dan es insoportable. El hedor venía del colchón, las almohadas horribles, la mampara de la ducha mejor ni lo comentamos y se escuchaba absolutamente todo en las habitaciones contiguas. Paredes sucias, en la silla de la mesita, hormigas... un horror... Eso sí, la chica de recepción, muy amable.
Y ya para colmo, el desayuno. Pagas 56 euros por una noche, con desayuno incluido, y por la mañana cuando pienso que voy a encontrarme con un desayuno tipo continental me dice la chica de la cafetería que lo que tienen es lo de una cafetería normal: café, colacao, infusiones, zumos y de comer, tostadas, tortas de Alcázar o cruasán... me quedé a cuadros...
No volveré, ni lo recomendaré... Ojalá hubiera sabido todo esto antes de reservar