Es nuestra segunda vez en este restaurante y en sabado. Hemos comido muy bien , menú de 28 euros. Entrantes muy buenos de embutido seleccionado, coca con tomate, croquetas de rustido excelentes, cohinita pibil y alcachofa a la brasa. y de segundo un bacalao tambien exquisito y costilla de cerdo, junto a un vino de la casa muy correcto. Y han mejorado mucho los postres, excelentes, el tartufo de limoncello y el original helado de xuixo de Girona, yo tomé un chupito de limoncello. Muy bien, una atención joven y dedicada¡¡¡¡ Aparte las bebidas y cafe quedó en poco mas de 30 euros por persona. Se estan escpecializando en carnes maduradas¡¡¡¡ Nos gusta la situación del restaurante, en un "turó" con vistas hermosas a la Plana y Pirineos¡¡¡¡
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